Este cuento fue recogido por Ramiro A. Calle en su libro "Cuentos espirituales del Himalaya" y nos habla de cómo el pensamiento puede llegar a traicionarnos si no tenemos control sobre la mente.

Este cuento fue recogido por Ramiro A. Calle en el libro "Cuentos espirituales del Himalaya" y nos habla de la importancia de estar presente en todo momento. En ocasiones, la imaginación nos lleva a un futuro incierto y nos aleja del ahora.

Este cuento fue recogido por Ramiro A. Calle en su libro " Cuentos espirituales del Himalaya" y nos recuerda la importancia de no caer en extremos. Al momento de buscar un logro debemos esforzarnos lo suficiente: ni excesiva indulgencia, ni demasiada pereza.

Este cuento fue recogido por Ramiro A. Calle en su libro "Cuentos espirituales del Himalaya" y nos recuerda la importancia de no holgazanear y dejar pasar el tiempo en vano. Cada día es el ideal para mejorar.

Este cuento fue recogido por Ramiro A. Calle en su libro "Cuentos espirituales del Himalaya" y nos recuerda que la verdadera sabiduría siempre es una aunque la encontremos de diferentes modos y en distintos lugares.

Este cuento fue recogido por Ramiro A. Calle en su libro "Cuentos espirituales del Himalaya" y nos habla de las muchas preguntas innecesarias que nos hacemos al estar en el sendero espiritual. En la búsqueda de la paz interior no es urgente hacerse preguntas incesantes, sino mejorar nuestro comportamiento en beneficio propio y ajeno.

Este cuento fue recogido por Ramiro A. Calle en su libro "Cuentos espirituales del Himalaya" y nos recuerda la importancia de no solo poner atención a nuestras propias necesidades, sino también a las de los demás. Para ello es importante cultivar el amor consciente e incondicional.

Este cuento fue recogido por Ramiro A. Calle en su libro "Cuentos espirituales del Himalaya" y nos explica que sufrir o gozar depende de las creencias y proyecciones que tenemos de la situación. Por esta razón tenemos que cuidar, organizar y armonizar nuestra mente.